Una nueva forma de crear

No voy a ser yo el que descubra todas las posibilidades que ofrecen las Inteligencias Artificiales, pero sí que quiero compartir mi experiencia trabajando con estas nuevas herramientas. Para mí, han supuesto toda una revolución, y es que muchas de las limitaciones que me encontraba al llevar a cabo ciertas ideas, ahora han desaparecido. Y es que muchas de las cosas que me parecían inimaginables, ahora puedo hacerlas o podré a llegar a hacerlas cuando las domine.

Midjourney, la entrada a un mundo fascinante

Como la gran mayoría de personas, la primera Inteligencia Artificial que probé es ChatGPT. Con este chatbot empecé a interesarme por las nuevas I.A., ya que sus resultados me parecieron impresionantes. Ahora bien, fue la llegada de Midjourney (y sobre todo sus actualizaciones) la que hizo que me petara la cabeza.

Este generador de imágenes, que funciona con un bot en Discord, es capaz de generar cualquier tipo de imagen que me venga en mente. Solo tengo que detallarla en el prompt y la magia surge por sí sola.

Ahora bien, no es tan fácil como parece. Redactar prompts, aunque parezca sencillo, tiene su intríngulis. Es un ensayo-error constante ya que no solo hay que realizar una buena descripción, sino que la I.A. necesita aprender para crear la imagen tal y como la queremos.

La combinación con otras I.A. o herramientas

Las I.A. no son perfectas. Es cierto que sus resultados pueden llegar a ser espectaculares, pero todavía tienen limitaciones y es probable que haya cosas que nunca puedan hacer por sí solas (al menos de momento). De ahí que la única manera de conseguir los resultados que buscamos, sea utilizando otras inteligencias o herramientas, como el Photoshop.

Por ejemplo, en el caso concreto de Midjourney, las tipografías no las lleva bien. Podemos generar una imagen espectacular, que parezca una foto, pero si queremos crear un cartel necesitamos sí o sí tener buen ojo y saber usar bien  el Photoshop para que la composición sea efectiva a la par que bonita.

O el caso de ChatGPT, que es capaz de “redactar” cualquier tipo de contenido, pero que no está lo suficientemente perfeccionado como para poder discernir si la información que genera es verídica o no, de ahí que haya que comprobar fuentes a través de páginas de confianza.

Toda idea requiere de su I.A.

“Que lo haga la I.A.” es uno de los comentarios que escucho cada vez más, pero no hay una sola I.A. Hay muchas y dominarlas todas es prácticamente imposible a menos que se sea bastante genio.

Por esta razón, como creativo sigo trabajando igual, pero utilizando las Inteligencias como una herramienta más. Pienso la idea e independientemente de lo que se trate, me formulo la siguiente pregunta: “¿Cómo podría llevarla a cabo?”.

La diferencia es que en muchos casos, en lugar de depender de un tercero, a día de hoy puedo hacerlo yo mismo. Solo tengo que buscar la Inteligencia que me permita realizar lo que tengo en la cabeza, aprender su funcionamiento y, con horas de práctica, materializarlo. Como en este post, en el que combiné hasta 3 I.A. para crear este contenido ficticio.

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